viernes, 22 de abril de 2016

LA PRIMAVERA DE BOTTICELLI






 



 

En la mitología romana Mercurio (en latín Mercurius) era un importante dios del comercio, hijo de Júpiter y de Maia Maiestas. Su nombre está relacionado con la palabra latina merx (‘mercancía’). En sus formas más primitivas parece haber estado relacionado con la deidad etrusca turms, pero la mayoría de sus características y mitología fue tomada prestada del dios griego análogo Hermes.





En la mitología griega las Cárites o Gracias (en giego Χάριτες, en latín Gratiae) eran las diosas del encanto, la belleza, la naturaleza, la creatividad humana y la fertilidad. Habitualmente se consideran tres, de la menor a la mayor: Aglaya (‘Belleza’), Eufrósine (‘Júbilo’) y Talia (‘Floreciente’).
Las Cárites solían ser consideradas hijas de Zeus y Eurínome, aunque también se decía que eran hijas de Hera, de Dioniso, o de Helios y la náyade Egle. Homero escribió que formaban parte del séquito de Afrodita. Las Cárites estaban asociadas asimismo con el inframundo y los misterios eleusinos.











































Venus era una importante diosa romana relacionada principalmente con el amor, la belleza y la fertilidad, que desempeñaba un papel crucial en muchas fiestas y mitos religiosos romanos. Desde el siglo III a. C., la creciente helenización de las clases altas romanas la identificó como equivalente de la diosa griega Afrodita. De esta forma Venus fue la esposa de Vulcano. Virgilio, como halago a su patrón Augusto y al gens Julia hizo a Venus, a quien Julio César adoptó como su protectora, ancestro del pueblo romano a través de su legendario fundador Eneas y su hijo Iulus.Venus nació de la sangre de los testículos de Urano fecundados en el mar cuando el hijo de Urano, Saturno, se los cortó con una hoz. De ellos se formó una espuma en la que surgió ella.


Flora, en la mitología romana, era la diosa de las flores, los jardines y la primavera. Aunque era una figura relativamente poco importante en la mitología romana, estando entre varias diosas de la fertilidad, su asociación con la primavera le otorgaba particular importancia al llegar dicha época del año. Su festividad, la Floralia, se celebraba en abril o a principios de mayo y simbolizaba la renovación del ciclo de la vida, marcada con bailes, bebidas y flores. Bóreas y su hermano Céfiro compitieron por sus amores. Flora fue secuestrada por la divinidad de los vientos, Céfiro, quien la tomó por esposa. Céfiro le entregó el imperio de las flores. Junto con Céfiro tuvo dos hijas: ella fue la madre de la primavera y de Carpo, la diosa de las frutas. Flora se mantenía eternamente joven.





Cloris era una ninfa hija de Areturo que fue raptada por el violento dios-viento del Norte (Bóreas) y transportada hasta el monte Nifates, en el Caúcaso. De esta relación nació una hija llamada Hirpace. Cloris fue pronto abandonada por Bóreas, que prefirió a Oritía, hija del rey de Atenas.


 En la mitología griega, Céfiro (en griego Ζέφυρος Zéphyros) era el dios del viento del oeste, hijo de Astreo y de Eos. Céfiro era el más suave de todos y se le conocía como el viento fructificador, mensajero de la primavera. Se creía que vivía en una cueva de Tracia.




Cupido (llamado también Amor en la poesía latina) es, en la mitología romana, el dios del deseo amoroso. Según la versión más difundida, es hijo de Venus, la diosa del amor, la belleza y la fertilidad, y de Marte, el dios de la guerra. Se le representa generalmente como un niño alado, con los ojos vendados y armado de arco, flechas y aljaba. Su equivalente en la mitología griega es Eros.





Género:  mitológico.

Tema: Es una obra impregnada de cultura humanística y neoplatónica de la corte de Lorenzo el Magnífico. Tiene un tono de narración situada fuera del tiempo real. Se presenta una atmósfera de fábula mitológica en la que se celebra una especie de rito pagano. Rompe con la pintura religiosa cristiana al ilustrar un rito pagano de primavera.


 Está realizado al temple de huevo sobre tabla. Mide 203 cm de alto y 314 cm de ancho y fue realizada entre 1480 y 1481.


Al estar en un bosque tiene muchas líneas verticales que sugieren seguridad, fuerza, efecto de ascensión, permanencia, estabilidad y dignidad.

El tipo de composición es de balanza, figuras del mismo tamaño y simétricas alrededor de una figura central.

Esta pintura tiene colores muy intensos que reflejan vida, por lo que puedo decir que este cuadro expresa serenidad y esperanza. También se puede expresar la armonía de los colores.

La perspectiva es geométrica, ya que todas las figuras están en línea

En la imagen podemos apreciar a Mercurio cogiendo un fruto del árbol. Mientras Cupido le dispara una flecha(de bronce o de oro) a Castidad,mientras mira a Mercurio.En general todas las caras de la obra expresan serenidad exceptuando la de Cloris, que expresa miedo ya que, está siendo raptada por Céfiro.



Alessandro di Mariano di Vanni Filipepi (Florencia, 1 de marzo de 1445 -Florencia, 17 de mayo de 1510), apodado Sandro Botticelli, fue un pintor del Quattrocento italiano. Pertenece, a su vez, a la tercera generación cuatrocentista, encabezada por Lorenzo de Médici el Magnífico y Angelo Poliziano. Procuraron la libertad de conducirse humanamente, recogida de la antigüedad clásica Giorgio Vasari narra, en su Vita de Botticelli, desde su infancia hasta su muerte. Esta obra pertenece a Le vite de' più eccellenti pittori, scultori e architettori. Menos de cien años después, esta etapa, bajo el mecenazgo de Lorenzo de Médici, fue considerada por Giorgio Vasari como una «edad de oro». Esto se debe al esplendor artístico alcanzado en la Florencia de fines del siglo XV.
La reputación póstuma del artista disminuyó notablemente en los siglos siguientes. Ésta fue recuperada a finales del siglo XIX; desde entonces, su obra se ha considerado exponente máximo de la gracia lineal de la pintura del primer Renacimiento. El nacimiento de Venus y La primavera son, actualmente, dos de las obras maestras florentinas más conocidas. Se expusieron por primera vez en la galería de los Uffizi, Florencia, en 1815.